Yo empecé en el DF, estudiando en el Sindicato Unico de Músicos, tocando en grupos de música versátil pero la parte de hacer rock era la que me gustaba más. Después de unos 3 años, me dio la loquera de empezar a buscar músicos y amigos y como mi hermano tocaba batería para un grupo que se llamaba Vantroi, ahí empecé en lo del rock, después hice mi grupo que eran Los Corridos (porquenos habían corrido de diferentes grupos y por eso nos pusimos así). En el grupo estaban dos hijos de Johny Laboriel, Johnny y Emanuel Laboriel y a tres meses de haber hecho la banda, ganamos una batalla de las bandas de Rockotitlán y ya le abríamos a El Tri, a La Lupita, en esa época, que fue 12 años atrás. Luego, me metí a la Máquina del Sonido, con Armando Molina, un señor ya grande y respetado en esto de la música. El necesitaba coristas y me llamó. De ser la corista, me hice la principal vocal y como él tenía que venir bastante a Los Angeles para lo de sus negocios, me dijo, "¿sabes qué fl aca? hay un grupo que esta buscando cantante porque su cantante está embarazada". Y ya fue entonces de "lánzate" . De una semana a otra, me vine sin conocer a nadie. Lo único que tenía era un nombre, que en ese entonces era Giovanni y él me iba a pasar a recoger al aeropuerto. Sólo tenía treinta dólares en la bolsa y la idea de regresarme en tres semanas. Me aprendí las canciones, nos fue super bien, a los chicos les gustó mucho, hice los 8 shows que estaban programados y me dijeron, "¿sabes qué, fl aca? ¡Quédate!". Fue así como me hice parte de la escena angelina y esas tres semanas se convirtieron en 12 años. Aquel grupo era Giovanni Arreola y los L.A. Mixers, con ellos estuve como 5 años. Y ya después de ahí salió Ana Sidel, la solista.

Viejas rocanroleras

Pues, no hay muchas chavas, pero creo que ya lo difícil es tan sólo permanecer en el medio con un producto que, a fi nal de cuentas, lo que te interesa es que la gente lo escuche. Es lo sufi cientemente difícil salir y estar presente, independientemente de si eres hombre o mujer. Pero, está siempre el estigma ese de que las viejas no somos fuertes, o no somos lo sufi ciente rocanroleras.

En L.A. Mal que bien, como ya tengo muchos años en esto de la música, mucha gente ya me conoce, sabe de mi música y mi propuesta, lo cual no quiere decir que les guste, pero ya saben quién soy y para mí, esa es mi ventaja. Hay un poquito más de respeto, porque si algún día dicen, "hay que darle un premio a la pinche Ana", va a ser por el aguante y por lo necia. Para mí, ésa es la parte buena, lo otro es que seguimos batallando porque no tenemos disquera y lo que les pasa a otras bandas independientes, que no hay tanta plata para hacer promoción y hacemos lo que podemos. Pero, sí hace falta un empujoncito. Lo de Verdad y Justicia (distribuidora independiente de alcance nacional a través de Navarre Dist.) fue un acierto total y como dice Rick Fazekas (fundador de V&J), hay que ser como una familia y apoyarnos entre todos y tratar de hacer más tocadas con más bandas, aunque sean del mismo sello, pero ya así el grupo de fans se van combinando y van creciendo. A m me gusta Los Angeles, pero sí quiero regresar a México con algo bien formado, quiero regresar a tocar a México con mi bandota y tiene que pasar en lo que falta de este año, porque hay que explotar lo que falta de este álbum, pues ya hemos empezado a grabar el siguiente. De hecho, había planes de ir a tocar al Acapulco Fest, pero por falta de dinero no se pudo hacer.

El resto de EE.UU.

Ahorita, el disco se ha estado vendiendo más en Chicago, New York, Minneapolis, en la costa este, y ahora que he visto ese interés por allá he pensado que hay que tratar de organizar algo, pero sigue haciendo falta el dinero. Porque, sí nos dicen "vente, güey". Pero, y ¿el pasaje qué? Hay quien lo puede hacer gratis, pero yo tengo que pagarle a mis músicos, estos chavos tienen sus familias y sus trabajos. Yo soy "pata de perro", a mí nada me ata a nada, pero los otros chavos a veces están hasta en otros proyectos en donde les pagan más, porque son músicos profesionales y de éso viven. Van conmigo porque me adoran y porque somos amiguísimos, pero ellos tienen lo suyo. En mi casa yo tengo mi ofi cinita y mi departamento de envíos y ahí estoy todo el día... a veces me llegan pedidos hasta de Suiza y eso es gracias al Internet. Nos está yendo bien, pero no como para irnos a dar un tour nacional y a mí eso es lo que más me duele, que sé que es un público hambriento y no lo podemos complacer.

El respetable

Pues, siento que cuando empecé había más entrega del público. Ahora, siento que hay una cosa como medio pasiva, también hay tantas tocadas que la gente no puede ir a todas, no hay tanta gente. Creo que hay más interés de otro público que no es latino. Por ejemplo, dos chicos de mis banda son americanos y ellos traen a sus amigos, van y les gusta y para mí eso es importante, que a pesar de que no hablen tu idioma estén ahí y a veces hasta se involucren más.

Después de "A Solas"

El disco estuvo grabado con un sonido que no queríamos que fuera muy pesado y eso tiene sus pros y sus contras, porque oyen el disco y les puede parecer "fresa", pero te van a ver en vivo y ya se dan cuenta de que es otra cosa. Yo siempre trato de hacer que mis shows sean divertidos, dinámicos. Nunca he sido de la idea de que "somos una banda de rock y somos bien malos". Eso nunca ha sido mi onda. Yo quería que mi disco fuera más accesible para que se pudiera tocar en la radio y por eso el sonido del disco es más limpio, no muy rockero. Ahorita, la idea para el nuevo disco es echarle mucha jícama y chile. He estado trabajando para que el sonido sea más "funksoñoso" y en éso estamos. Queremos que tenga "funksoña" rockera, pero todavía va a faltar un rato, yo creo que unos 8 meses. Por ahora, queremos impulsar más la vida que le queda a este disco.

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